Varna, 23 de diciembre.
Querida Becky:
El viaje hasta el momento ha sido infructuoso, creo que el maligno ser que persigo adivina cada uno de mis pasos, como si leyera la mente de alguien que lo advierte de mis deseos de poner fin a su vida y con ello a las misteriosas afecciones que a usted la aquejan. El barco en que viaja, Czarina Catherine, no atracó en Varna, donde lo esperaba sino en Galatz un puerto cercano y de difícil acceso.
Espero que al recibo de esta nota, se encuentre bien, y que a pesar de los múltiples esfuerzos que debe hacer usted, una madre ejemplar, para que las beckytas y el joven Jorge gocen de las fiestas de navidades sin saber de la fatiga física y mental que la afligen, pueda tener un minuto de paz.
Pienso en usted a cada momento, confundo el sueño con la vigilia, sólo su imagen me ata al mundo real. Mi mente no esta del todo sana, en muchos pasajes, durante la noche, este ser maligno puebla de imágenes lascivas mi cabeza, llenándola de hermosas mujeres de todos las razas, que se ofrecen siniestramente ante mi casto cuerpo. Más esto, no hace otra cosa que reforzar mis ganas, de estar con usted nuevamente y poder besar su mano perfumada de fresca lavanda.
Los inescrupulosos y lascivos gitanos, esbirros de la peor clase, siguen su tarea de atormentarme e impedir mi misión. He sabido, de buena fuente, que dos importantes nobles extranjeros; el Duque de Portugal y Lord Dedalus, influyentes seguidores de lo oculto obedecen las ordenes del innombrable, quien les ha prometido la inmortalidad literaria homo erótica a uno y la virginal hija del Zar de Rusia al otro, si logran detenerme. Querida Becky, no deje que estos hombres, por poderosos y seductores que sean se acerquen a usted en mi ausencia.
No tengo mas fuerzas para escribir, la vela se extingue y mi mano se rinde a la fatiga y al dolor del cuerpo. Mi corazón, fortaleza inexpugnable de la cual usted es dueña sigue escribiendo que la ama mientras se cierran mis ojos que sueñan con un pronto reencuentro.
Siempre suyo,
Jonathan
4 comentarios:
Que no me escarseen a mis gipsys kings y princes, mire q le pueo mandar al yona una de nostras maldisionez, como ser:
Anda ya, y mal arraclán te pique estando a siete sueño
Cara angariya, enchiquerao, te veas con un Miura
A la metá del Creo no llegues, esaborío
Dio t'aconserve lo s'ojos... en aguardiente seco, sentraña gatuna
FELIZ NAVIDAD QUERIDA BECKY!!!
TE ENTREGARÉ MI REGALO DE NAVIDAD LA PROXIMA VEZ QUE NOS VEAMOS.
Feliz navidad para ti también, querido Stephen. Y también un gran saludo para Random y Diego. Nos vemos a vuelta de Año Nuevo (y guárdame el regalo, que me encantan). Un beso a todos,
Becky
¿Hay noticias del Jonathan? ¿Tendrá conexión a internet allá en los cárpatos?
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